Como el que se llevó el señor Alcacalde de Barcelona al no poder seguir el recorte de cintura que le plantearon los grandes directores de Ciutat Morta.
Partiendo (la pana) desde aquí, empezó un no parar de recuerdos a alcaldes con Iglesias de por medio. No, el de la coleta no, el otro. El de Verdad.
Por lo demás, os avisamos que de momento no nos vais a poder oír en directo nada más que a la antigua usanza, por FM con tu transistor de toda la vida, ya que andamos de arreglos en la radio. La programación bronkil estará alterada, pero eso sí, por el podcast seguiréis teniendo vuestra droga contratiempil.
Siendo contingente necesario tuvimos a Joseba B. Lenoir, Cheyenne 40, Stiu Nu Stiu y a Vialka.